lunes, 28 de febrero de 2011

Sin Andarse Por Las Ramas © (Reseña del disco “The King of Limbs” de Radiohead)




Una vez más Radiohead hace uso de la innovación y echa mano de la tecnología para dar a conocer su nuevo material discográfico. “The King Of Limbs” lleva como título la nueva producción, y al igual que su disco anterior, el lanzamiento lo hacen desde su página oficial, ofreciendo la versión digital en formatos MP3 y WAV; listos para ser disfrutados —en minutos— en cualquier computadora o reproductor de sonido, así como una edición de lujo que consta de dos discos de vinil, un CD y material adicional a la orden de los coleccionistas y sus más fieles seguidores. Esta vez, la banda británica le pone precio a algo que pudiera ser considerado por sus incondicionales como una pieza invaluable e inaceptable de ser excluida de sus colecciones. La agrupación liderada por Thom Yorke regresa con bombos y platillos, con sonidos tal vez ajenos a sus inicios; pero ya familiares para sus procesos creativos y de la mano de esa necesidad de las masas por escuchar lo que trae consigo sus nuevas producciones. Sólo basta apreciar la demanda por el ansiado disco a apenas unos días de su lanzamiento, y las miles de visitas al video de su primer sencillo “Lotus Flower”, presentado a nivel mundial en Youtube, para considerar el álbum como algo digno de conocerse. El lanzamiento de “The King Of Limbs” es un hecho, y llega al alcance de millones de personas, no sólo como un mensaje de independencia para las compañías disqueras, sino como un agradable recordatorio para los oídos cada vez más acostumbrados a lo cotidiano. Solamente fueron necesarias ocho canciones para demostrar que, a la par de las nuevas propuestas de calidad dentro de la música, se encuentra Radiohead como esa esencia que se mantiene en el ambiente sin importar lo que suceda alrededor.
El disco comienza con “Bloom”: delirante introducción para un disco que llega cargado de sonidos benévolos e incesantes, lejanos a esa expresión belicosa que caracterizó a Radiohead en sus inicios, pero con esa inquietud que acompaña a sus propuestas recientes, como un deseo de encontrar nuevas formas detrás de los ecos y los efectos auditivos. En seguida, y casi como contraparte, llega “Morning Mr. Magpie”: podría ser la pieza que más invite a la euforia, pero en momentos sucumbe ante la ecuanimidad con la voz de Yorke y las líneas del bajo. Como tercer track se encuentra “Little By Little”: tema que provoca encontronazos de los sentimientos debido al vaivén de sonidos; como salida de un western del nuevo milenio y acompañada de placeres auditivos. Una buena opción para un segundo sencillo. La siguiente canción es “Feral”: el tratar de entender no es una opción, simplemente el escucharla sería la mejor manera de describirla y la opinión personal debería de ser su galardón. Para darle fuerza y promoción a este disco se encuentra “Lotus Flower”: canción por demás disfrutable y placentera, llena de sonidos pulcros y acompañada de una sutil voz que motiva a la mente y a los oídos a seguir gozando. Invita a lo alegre, a la relajación, a escucharla de nuevo. Después del momento agradable llega otro más con “Codex”: aquí los miembros parecen rendirle tributo a lo acústico, a las raíces de la banda, a ese piano que los ha acompañado por tantos años. Una canción que puede presumir ser de lo mejor del repertorio sin rozar siquiera los límites de la exageración. “Give Up The Ghost” se mantiene dentro del plano acústico, pero con sonidos distorsionados y adornada de Voces en Off, como un himno entre la realidad y la locura, como para disfrutarse en el lecho o el diván. La última escala del viaje es “Separator”: una fina pero pertinaz batería acompaña toda la canción e inspira a reconocer los demás sonidos que la componen. Las notas y las voces despiden de gran manera al momento dejando una sensación de curiosidad por descifrar todavía más los mensajes de esta talentosa agrupación.
Radiohead no sólo sorprende a todos al lanzar el disco veinticuatro horas antes del momento anunciado, sino también con la manera en que pueden hacer de ellos mismos, y de sus propuesta musicales, lo que mejor les plazca, dando cada vez un mismo resultado: sobrepasar con talento lo convencional.
El disco no engalana a su discografía como el mejor trabajo, pero sin lugar a dudas, la colección de gratos sonidos, y las atmósferas musicales lo hacen un disco de calidad. Radiohead parece separarse cada vez más de esa agresividad que tal vez le propiciaba la juventud, pero ofrece una producción llena de estética, que tal vez, trajo consigo la madurez. “The King Of Limbs” es un disco para disfrutarse en la comodidad, no tanto para hacerlo en la celebración. La lírica se acerca más al desahogo, que a la melancolía, y su propuesta musical atrae de inmediato al gozo. A casi dos décadas de su primer álbum, Radiohead ofrece uno más reciente, con ese sello imborrable y tomando con firmeza el estandarte que la música alternativa hoy en día les confiere.

Alex VC

3 comentarios:

  1. Pura razón tienes. Muy buen discom signo de Radiohead y muuuy buen artículo, digno de tì. te felicito. Un abrazo Lacho Alonso.

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  2. Qué buena reseña!!!, me encanta radiohead y no puedo esperar a escuchar el disco completo. luego me dices como bajarlo (porfa). Un beso

    Silvia García.

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  3. Me vengo enterando por casualidad de esta página. Estás cañón que artículo tan bueno, das detalles, datos, en que revista apareció para leerte ahí también. Sorprendes de buena manera te felicito.

    Patricio Jaimes.

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